Existen muchos amuletos para la prosperidad, pero sin duda, el frasco de la abundancia es uno de los más usados en todo el mundo.
Su origen no está muy claro, pero lo que sí se sabe es que casi todas las culturas han querido simbolizar la acumulación de riquezas a través de frascos de prosperidad.
El frasco de la abundancia también es usado para «invitar» a la prosperidad a nuestros hogares y que siempre la despensa y la billetera estén llenas. Por ejemplo, en algunos países del lejano Oriente, como China, es muy común que en las casas se tengan jarrones de la abundancia.
Estos recipientes están llenos de monedas, papeles con buenos deseos e imágenes que simbolizan la riqueza.
En los últimos tiempos, se ha generalizado en todo occidente, el uso del frasco de la abundancia, pero su contenido varía al que se conoce en oriente.
¿Cómo elaborar un frasco de la abundancia?
Para elaborar nuestro frasco de la abundancia, es necesario primero, contar con un recipiente de vidrio de boca un poco estrecha. Puede ser un botellón o un jarrón.
Lo importante es que su boca sea más estrecha que el resto del cuerpo, ya que esto simboliza que la riqueza llega, pero no se va fácilmente.
También necesitas sal gruesa, ojalá marina; arroz, seis monedas y diferentes tipos de granos: maíz, lentejas, fríjoles, alubias, etc.
La cantidad de tipos de granos varía de país en país. En algunas partes se usan siete tipos, en otros ocho. Escoge el número con el que más vibres, por ejemplo, quienes practican Feng shui escogen ocho por ser un número asociado con la prosperidad.
Cuando tengas los materiales añade por cucharadas primero la sal, luego el arroz y capa por capa los granos.
Hay personas que no se sienten cómodas trabajando con sal, pues la ven como un elemento de mala suerte, si ese es tu caso, cámbiala por azúcar.
Finaliza añadiendo las seis monedas de mayor denominación de tu país. Si consigues monedas de Feng shui (las que tienen un orificio cuadrado en el centro) muchísimo mejor.
Ten en cuenta que, si vas a usar de estas monedas, debes colocarlas siempre con el lado yang hacia arriba, el lado yang es donde están los cuatro ideogramas.
Programación y uso del frasco de la abundancia
Después de haber llenado tu frasco, acércate a él y háblale, prográmalo para que traiga y conserve la abundancia en tu vida.
Puedes usar esta frase:
“Yo (tu nombre), te programo para que atraigas y mantengas la abundancia y la prosperidad a mi vida. Gracias que hecho está”.
A continuación, cierra muy bien el frasco de la abundancia y colócalo en un sitio oculto, donde solo tú lo puedas coger, y así el frasco pueda tener solo tu vibración energética.
Muchas personas renuevan su frasco de la abundancia en cada año nuevo, pero la verdad es que esto no es necesario.
Tu puedes conservar el frasco de la abundancia mientras su contenido se mantenga en perfecto estado, pero si ves que los granos se empiezan a dañar o la sal se derrite, agradécele por haberte ayudado y vacía todo lo que esté en él, incluidas las monedas, en una maceta, y el frasco lo puedes botar a la basura.
Este ritual lo puedes realizar en los días éxito, recibir, iniciar y proponer que están señalados en el Tong shu mensual.
