Lilith en las casas astrales ¿Cuál es el significado?
La posición de Lilith en las casas astrales muestra en que área de la vida la energía de la Luna Negra planteará los retos que deben ser superados, en el camino de la evolución personal. Es así como la presencia de Lilith en las casas astrales habla de aspectos relacionados con la deuda kármica, los miedos, las facetas escondidas de la personalidad y hacia dónde dirigir el trabajo de conciencia.
Ten presente que Lilith simboliza la cara oculta, la energía rebelde primaria que se intenta domesticar o simplemente ignorar, porque puede parecer inconveniente para mostrar ante la sociedad. Al conocer la posición de Lilith en las casas astrales, puedes comprender en profundidad uno de los aspectos más difíciles de la Carta Natal, repleto de pruebas que buscan llevarte hacia la superación.
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Lilith en las casas astrales
Para determinar la posición de Lilith en las casas astrales, es necesario estudiar la Carta Natal del sujeto, trazada a partir de la hora, lugar y fecha de nacimiento. Estos datos permitirán además descubrir la energía del signo zodiacal, que mueve a la Luna Negra.
Lilith en la Casa I
Cuando estudiamos el efecto de Lilith en las casas, encontramos que la primera posición (o Casa I) suele tener un fuerte efecto en la personalidad del individuo, ya que esta locación del mapa astral está vinculada con el ego.
Lilith en la Casa I habla sobre un aspecto de la personalidad que es negado, bloqueado o rechazado por el individuo. El sujeto intenta asumir un control férreo sobre cómo se expresa públicamente y es percibido por terceros.
Por otra parte, al integrar la energía de la Luna Negra, puede aprovecharse el magnetismo profesional y la creatividad que caracterizan este emplazamiento (Lilith en Casa I), además de la facilidad de extraer lecciones positivas de las situaciones de contraste.
Lilith en la Casa II
Con Lilith en la Casa II, el individuo puede pecar de materialista, e incluso llegar a basar su seguridad y valor propio, en la cantidad de bienes y posesiones que consigue acumular. También indica patrones relacionados con deudas, compras compulsivas y vivir de apariencias.
La cara positiva de este emplazamiento, que se presenta al integrar la energía salvaje de la Luna Negra, habla de generosidad a toda prueba, y capacidad para ayudar a otros a entender la verdadera esencia del valor personal.
Lilith en la Casa III
Dificultades en el tema comunicacional. Proceso mental vertiginoso, que conlleva a frecuentes errores de juicio. Rigidez en las ideas y opiniones, acarrea desencuentros con hermanos y/o personas del entorno (vecinos).
Lilith en la Casa III confiere una amplia percepción al sujeto, la cual puede ser usada constructivamente, para analizar los hechos en profundidad, antes de emitir juicios de valor apresurados.
Lilith en la Casa IV
La presencia de Lilith en la Casa IV anuncia karma familiar, o bien la tendencia a manifestar rechazo hacia el hogar (desarraigo), representado por las figuras paternas, el núcleo familiar o la patria.
Las personas con Lilith en la Casa IV suelen manifestar dificultades para integrarse, aunque lo intentan con gran fervor, algo que puede minar los aspectos más independientes de su personalidad.
Este emplazamiento, confiere al nativo una vena sensible y empática, que le permite conectarse con otros a niveles profundos, siempre y cuando, sane sus heridas emocionales (previamente).
Lilith en la Casa V
En esta posición del mapa astral, Lilith puede bloquear el disfrute del placer, por lo que conduce al sujeto a una vida de restricción autoimpuesta o de riesgos exacerbados por la creciente necesidad de sentir.
Estas personas pueden ser proclives a experimentar triángulos amorosos (y decepciones), al igual que problemas con los hijos (para tenerlos o para desarrollar una relación con ellos).
Es conveniente, que el sujeto aprovecha la resistencia, optimismo y capacidad de adaptación que confiere la Luna Negra en la Casa V, para canalizar los impulsos positivamente, y construir el futuro que desea.
Lilith en la Casa VI
La influencia de Lilith en la Casa VI, es capaz de llevar al individuo al más puro extremismo en materia de salud y trabajo. Bien puede preocuparse exageradamente de su estado físico, como olvidar por completo sus necesidades.
De la misma forma, puede convertirse en un profesional desorganizado y con carácter bélico, o un trabajador que trata de emular a un robot, desgastándose en la búsqueda de inalcanzables ideales de perfección.
Con la Luna Negra en la Casa VI el reto es encontrar el equilibrio (el punto medio), y aprovechar la facilidad para comprender la integración de los sistemas (cómo encajan las piezas), que ofrece esta posición astral.
Lilith en la Casa VII
Posesividad y poca tolerancia en las relaciones, en especial las de pareja. Lilith en la Casa VII representa un fuerte lazo de necesidad y dependencia hacia el compañero, lo cual puede provocar abusos (infidelidades, traiciones).
Lilith en la Casa VII indica lucha constante entre compromiso e independencia, dado que el sujeto carga con las malas experiencias de relaciones anteriores. Sin embargo, este emplazamiento, permite observar los detalles y presentar soluciones efectivas, para evitar las crisis.
Lilith en la Casa VIII
Lilith en la Casa VIII impone revisar conceptos profundos, como la sexualidad, el poder, la perdida, y la muerte. Aunque se trata de un emplazamiento planetario difícil, que puede acarrear pesimismo y depresión sobre el sujeto, es importante reconocer que confiere compasión y gran comprensión de la naturaleza humana, por lo que son personas casi imposibles de engañar.
Lilith en la Casa IX
Opiniones controversiales, que lo llevan a enfrentarse a otros. Dificultad para abrir la mente a nuevas propuestas y personas, en especial con distintos orígenes (extranjeros o de otra religión).
Al trabajar conciencia, a través de Lilith en la Casa IX, el individuo comprende que su sed de conocimientos es un puente que lo ayuda a acceder a otros puntos de vista, y crear zonas de convergencia con los demás.
Lilith en la Casa X
Este emplazamiento de la Luna Negra, se caracteriza por un alto grado de exigencia impuesta sobre el mismo individuo, y las personas de su entorno, con las que suele hacer comparaciones peligrosas.
Si bien Lilith en la Casa X puede llevar al individuo a tiranizarse, a través de la búsqueda de un estatus social o profesional cada vez más elevado; también ofrece perseverancia y responsabilidad en el camino hacia la meta.
Lilith en la Casa XI
Lilith en la Casa XI señala la necesidad de aprender a trabajar en equipo, e integrarse a la comunidad. Deben revisarse las metas y los proyectos, a fin de que su impacto trascienda lo meramente individual, enfocándose en lo colectivo.
Lilith en la Casa XII
Las pruebas de Lilith en la Casa XII se relacionan con lo kármico, las creencias del sujeto (su propia espiritualidad), y el inconsciente. Es (sin duda) la Luna Negra más misteriosa, que esconde una intensa emocionalidad.
Esta posición astral, dota al nativo de una gran empatía hacia los otros seres, además de la capacidad de ayudarse a sí mismo y a terceros, a encontrar la evolución, trabajando aquellos talentos que permanecen en la sombra.
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