Una oración de limpieza espiritual debe hacerse cada cierto tiempo para equilibrar, recomponer o restablecer esas energías que se traducen en imágenes mentales y que son las que te mueven y le dan fuerza a tu vida.
Debes tener en tu mente imágenes de alegría, optimismo, con un futuro abierto, imágenes donde te ves disfrutando la vida, alegrándote, sintiéndote en paz y feliz sola o junto a otros.
Para lo anterior es necesario hacer una oración sentida, una oración poderosa que te conecte con ese Dios interior, con tus ángeles protectores y con lo mejor de ti para librarte de toda energía negativa y abrir los caminos a la prosperidad.
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La oración de limpieza espiritual
Debes hacer esta oración de limpieza espiritual con extrema unción y afecto, pedir con fuerza:
Pido a la luz divina que me ayude a encontrar los caminos de mi felicidad,
Pido para conectarme con el propósito de mi vida y la alejarme de todo aquello que me trae sufrimiento y contradicción.
Pido para que mi vida tenga alegría y unidad. Que mis diversos ámbitos marchen en conjunto y se desarrollen para dame paz, amor y felicidad.
Pido reconciliarme conmigo y con otros, para alcanzar la alborada de una felicidad plena.
Estoy muy agradecido a Dios y a mis guías profundos.
Amén
Esta oración puede ser adaptada pidiendo por los seres queridos, poniendo el propio nombre o el nombre de otros, acudiendo a la ayuda de los guías en los cuales tengo más fe, entidades femeninas o masculinas.
Apoyos para que la oración tenga más fuerza
Puede apoyar esta oración de limpieza espiritual con:
- la quema de Salvia, que un poderoso ingrediente en la sanación y en la limpieza de campos energéticos;
- encender una vela blanca que ayuda a purificar espacios y nos da paz interior;
- encender incienso y mirra, poderosos ingredientes para limpiar ámbitos de energías negativas.
Es importante señalar que de acuerdo a las particulares creencias de cada persona, todas respetables, se pedirá a las divinidades o guías pertinentes, que vendrán en nuestro auxilio de la forma más conveniente.
Sin embargo es común a todos, la fe y la entrega que pongamos en estas oraciones hechas con verdad interna y que nacen de una profunda necesidad.
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