El arte de re-conectar con nuestra esencia y potencial interior
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La esencia en el ser humano es la fuerza innata que trasciende los límites de lo físico, que reside en lo más profundo del ser. Es esa parte de nuestro ser conectada con la inteligencia lógica del Universo que rige toda la existencia así como nuestro desarrollo evolutivo o aptitudes innatas.
Nuestra esencia va mas allá de nuestro ADN, características externas o mentales. Se la conoce con el nombre de Conciencia, Alma para muchos y que en realidad constituye nuestra parte inmutable, en otras palabras la Esencia del Ser. Nuestra esencia es aquella parte del Todo que vive en cada uno de nosotros y nos conecta al Universo y sus principios.
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Pero, cómo podemos reconocerla?
Nuestra esencia la podemos reconocer en la fuente que nutre nuestra voz interna más allá del Ego. Este potencial de energía divina que forma parte del sistema de pensamiento correcto conectada a la Presencia, siendo de esta manera la guía principal de orientación en nuestros pasos en la vida.
Nuestra Esencia también es aquello que nos hace sentirnos conectados, que nos hace hermanos con la Creación y su Origen fundiéndonos en Uno con la conciencia de Unidad.
Somos cuerpo, mente con un carácter único e irrepetible, y cada uno de nosotros formamos parte de esta conciencia Universal que nos une, a la Esencia, siendo Uno con ella. Nuestra Alma, nuestra Esencia yace en nuestro interior siendo su mayor anhelo poder manifestarse en todo su esplendor durante nuestra existencia física.
Nuestra Esencia nos convierte en Uno con el Todo, cuya sabiduría infinita yace en el fondo de nuestro ser. Al mismo tiempo en un plano paralelo, la Esencia es también aquello que nos hace únicos e irrepetibles. Somos Uno con el Todo, iguales y diferentes, separados al mismo tiempo, duales.
Nuestra misión en este plano terrenal es reencontrarnos y experimentar en el juego de la dualidad de la vida a través de nuestras propias circunstancias, potenciales y posibilidades físicas, y de esta manera así, cuando nos llegue la hora, volver a Casa.
A todas las personas que no encuentran su lugar en este mundo, que sienten que no encajan en ningún sitio y que no entiendan nada de lo que les ocurre en sus vidas, la vida se les convierte en ingrata, cansina y sin sentido.
A esas personas que viven identificadas con sus miedos, carencias e inseguridades, que se han creído el personaje con la máscara que han ido creando durante toda su vida, la búsqueda del sentido de la vida no ha hecho mas que empezar.
A aquellas personas que pasan la vida en sufrimiento, este es el momento de re-conectar con su Esencia, con esa parte de cada uno que somos realmente, con nuestro poder. Tu vida así encuentra su sentido.
No importa lo dormido que hayamos estado. Nuestra esencia es algo que siempre ha estado dentro de nosotros, que somos ya de por sí.
Es hora que llevar a cabo la función del origen de nuestras vidas y quitarnos el filtro que nos impide ver la realidad.
Algunos pasos entre muchos otros para re-conectar con tu esencia
El primer paso es tomar conciencia de que tu esencia va mucho más allá de tu Ego. Desde que nacemos nos van poniendo etiquetas como un nombre, una religión, unas creencias e ideas, entre otras.
Tu sistema de pensamiento errado crea tu percepción de la realidad y tu forma de relacionarte con los demás, con tus miedos, carencias e inseguridades.
Por vivir en el miedo, por sentirnos separados hemos ido creando una máscara, a la que se le puede llamar Ego, aunque su función sea esencial y primaria para protegernos.
Cuando tomamos conciencia del poder de nuestro ego de interferir con nuestra esencia y no dejamos que tome el control de nuestras vidas, empezamos el camino para re-conectar con nuestra esencia.
Un buen método para conectar con nuestra verdadera esencia, seria atreverse a cuestionar todas estas etiquetas y creencias que nos han sido impuestas desde la infancia.
Pregúntate, reflexiona de forma totalmente honesta:
¿Cómo seria yo sin esta etiqueta que he creado?
¿En quién me convertiría sin estos miedos, carencias y limitaciones?
¡Escúchate!
Un segundo paso es practicar la meditación de alguna o de otra manera para conectar con tu esencia y dejar atrás el ruido del Ego.
Nuestro Ego como un caballo salvaje, al que debemos aprender a domar para que nuestra esencia pueda retomar el lugar que le pertenece.
Recuerda que meditar, los ejercicios requieren de un tiempo, fuerza de voluntad y disciplina de la misma manera cuando vas al gimnasio.
La clave está en la persistencia y donde pones tu atención y enfoque.
Escoge un momento del día que puedas estar tranquilo, siéntate cómodamente, cierra los ojos y empieza a respirar poniendo todo tu enfoque en el proceso de la respiración.
Cuando tu mente empiece a generar pensamientos deberás dejarlos pasar, la observación es el secreto, respira. La meditación te ayudará a conectar con tu verdadera esencia y a no identificarte con el ruido de los pensamientos que va generando nuestra mente.
Un tercer paso es ponerse a dieta de ruido y toxicidad, incluso de información y relaciones tóxicas.
Cuando filtramos las vibraciones negativas, esta acción nos ayuda a conectar con nuestro verdadero ser.
Este paso es especialmente indicado a personas que no saben quienes son realmente, ni para qué están aquí, que van a la deriva y sin rumbo por la vida. Por ello es esencial cuidar también de tus relaciones personales y afectivas, que te juntes con personas que te sumen, que te aporten, que sean afines con tus principios y valores.
Rodéate de personas que no te resten esa energía, la cual tanto necesitas para crear mejores y mayores potenciales positivos. Al menos hasta que el reencuentro con tu esencia se encuentre más cerca de materializarse.
Esto te ayuda a crecer como persona, subir la autoestima y reconectar con tu poder y esencia.
El cuarto paso visualiza a tu yo superior, un alter Ego como herramienta terapéutica.
Todos tenemos un yo superior o un líder interno, esa parte que guía nuestros actos y hace que al final todo se encauce.
Conecta con esa versión mejorada de nosotros mismos que tiene, fuerza, sabiduría, compasión, seguridad, valentía, entusiasmo, confianza, alegría, vitalidad, optimismo, y sobre todo paz.
Recuerda que para encontrar el sentido en nuestras vidas, nuestro yo superior sabe que tenemos un propósito que va mucho más allá de nuestro ego y nuestros miedos.
Dale vida y forma, atrévete a visualizarlo pudiendo ser una forma humana, animal, quizás es un personaje animado o un superhéroe que te inspire, pudiendo incluso ser algo abstracto, tu propio líder interno, y guía, el Super héroe que ya eres.
No te olvides de que cuando hayas elegido aquello que simboliza a tu yo superior puedes recrear figuras, fotos para de esta manera sentirte más conectado a tu esencia, con fe, seguridad.
El quinto paso, aprende a confiar en tu intuición.
La intuición es esa voz interior, ese poder de intuición que nos sirve de guía. Reconoce esa intuición en tu cuerpo, cierra los ojos, respira, concéntrate y date permiso para sentirla.
Observa tu cuerpo. ¿Dónde sientes esa voz interior dentro de ti? Aprende a identificar este poder y desarrollar la intuición que te re-conecta con tu esencia cuando lo haces desde la coherencia contigo mismo.
Al superar tus miedos y limitaciones, el poder interior de desata automáticamente. Vive así una vida mucho más plena que te conecte con tu Esencia.
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