Sembrar la luna roja. Conoce este poderoso ritual femenino
Sembrar la luna roja es un poderoso ritual femenino, basado en las antiguas tradiciones chámanicas, y diseñado para propiciar la sanación del linaje materno y la reconexión con lo femenino.
El termino luna roja señala el período de tiempo en que sucede la menstruación. En este sentido, el concepto une dos importantes figuras: la luna (lo femenino) y el color rojo (por la sangre menstrual).
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El ritual de sembrar la luna roja es muy sencillo, aunque cargado de simbolismo espiritual y mágico. Se trata de ofrendar a la tierra la sangre obtenida, durante la menstruación, conectando así con la Madre Primigenia (la Tierra).
Evidentemente el proceso requiere liberarse de todos los tabúes relacionados con la sangre menstrual, incluyendo cualquier sentimiento de asco o vergüenza, para retomar la emoción original: el orgullo de lo femenino.
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Sembrar la luna roja, honrar la sangre
No es algo fácil de hacer. La mayoría de las mujeres posee un gran número de condicionamientos negativos (culturales, religiosos, familiares y hasta políticos) vinculados a la menstruación.
Sin embargo, grupos de empoderamiento femenino en todo el mundo trabajan, desde hace años, recuperando el concepto de una feminidad saludable, libre de complejos y culpas (propias e infligidas).
La difusión de rituales como sembrar la luna roja, técnicas como la respiración ovárica y grupos de apoyo como las carpas rojas, son una muestra del resurgir de la sabiduría femenina, en esta era.
Las culturas antiguas veían el proceso menstrual como algo sagrado, una señal del regalo divino que recibían las mujeres como creadoras de vida, y de su unión especial con la Madre Tierra.
Cuando se dice que el ritual de sembrar la luna roja permite sanar el linaje materno, se refiere a que la sangre menstrual revive la conexión con tu aparato reproductor femenino y por ende, contigo misma y tus ancestros.
Recuerda que estuviste en el útero de tu madre, y ella estuvo en el de tu abuela y así se forma una cadena poderosa e infinita. Al honrar tu menstruación, honras a todas las mujeres que te antecedieron y a las que vendrán después de ti.
Recogiendo la luna roja
Como ya se mencionó el proceso de sembrar la luna roja, es bastante sencillo. El primer paso es recolectar la sangre de la menstruación, lo cual se simplifica si utilizas la copa menstrual o toallas (compresas) de algodón lavables (ecológicas).
En caso contrario, puedes usar un trozo de tela de algodón natural y colocarlo de la misma forma que fuese una toalla femenina. Algunas practicantes emplean algodón estéril, pero es un tema de preferencia.
Importante: No utilices las toallas sanitarias sintéticas, que comúnmente se comercializan, para realizar el rito.
Puedes practicar el ritual de sembrar la luna roja durante todos los días de la fase menstrual, o un solo día (aquellas que se deciden por un día, generalmente escogen el primero).
- Una vez recogida la sangre menstrual en la compresa, copa menstrual o algodón, colócala en un recipiente con poca agua (el envase solo será utilizado para este fin).
- Una vez la sangre se libere en el contenedor con agua, retira la copa o toalla.
- Utiliza el agua, con la sangre menstrual diluida, y riega una planta con ella. Usa toda el agua, no guardes nada. Mientras riegas la planta, agradécele a la Madre Tierra la bendición de ser mujer y la relación con las mujeres de tu familia.
- Lava el recipiente usado para el riego y guárdalo cuando este seco.
Puedes acompañar el rito de sembrar la luna roja, encendiendo una pequeña vela blanca, o realizando una meditación con la llama rosa para bendecir a las mujeres de tu familia o con la llama violeta para purificar la relación con ellas, en caso de que tengas asuntos pendientes a los que aplicar la Ley del Perdón.
El rito de sembrar la luna roja solo puede ser desarrollado por mujeres que aun experimentan el fenómeno de la menstruación. Para aquellas que se encuentran en la fase menopaúsica se recomienda un ejercicio sustituto.
La actividad suplementaria consiste en realizar una meditación especial, durante la fase de Luna Nueva, para contactar con la sabiduría femenina desde la visión de la mujer que ha vivido y experimentado todas las fases de la femineidad.