Soñar con un gato negro, manifestación de los temores ocultos
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El gato negro ha sido considerado habitualmente como un símbolo del mal agüero. Cruzarte con uno cuando vas camino de un examen, del trabajo o de cualquier otra situación que sea importante para nosotros implica que no irá muy bien la cosa. Soñar con un gato negro suele asociarse a que el subconsciente nos envía la señal de que tenemos un problema oculto al que no queremos hacer frente.
Sabemos que existe y le damos continuamente vueltas a la cabeza pensando en él. Sin embargo, nos falta la valentía de involucrarnos en el problema para intentar darle una solución. El carácter sigiloso y misterioso del gato negro simboliza el problema oculto. Se mueve en nuestro interior sin hacer apenas ruido pero somos capaces de notar su presencia.
En otras ocasiones soñar con un gato negro augura la llegada de infidelidades y mal de amores. Hay quienes consideran que la presencia de este felino en sus sueños es símbolo de buena suerte. Incluso puede interpretarse este sueño como un mensaje para que sigamos el camino vital que nos hemos trazado, obviando el qué dirán. La seguridad en nosotros mismos nos hará evitar a esas personas que intentan controlar nuestra vida.
Soñar con un gato negro y el significado de sus variantes
Soñar con un gato negro atacándonos
Está relacionado con los miedos personales. La ansiedad generada por nuestros temores hace que vivamos obsesionados con que todo lo malo nos ocurre. Sin embargo, dichos temores no son ciertos y lo sabemos, pero no somos capaces de deshacernos de ellos.
Si el gato negro nos ataca y no podemos con él quiere decir que somos débiles, sin mucha personalidad para hacer frente a los problemas. También sirve de aviso de que en nuestro entorno hay gente que nos quiere hacer daño. Debemos estar en guardia.
Gato muerto
La tradición suele indicar que estamos ante un mal augurio, pero no siempre es así. En breve tendremos un problema grave, eso está claro, pero la noticia positiva es que lo superaremos. El gato negro muerto lo indica. No obstante, la situación por la que pasaremos será muy desagradable ya que la persona con la que tenemos el problema será un familiar o amigo íntimo.
Soñar con un gato negro rondando la casa u observándonos
Implica que la mala se acerca o al menos en nuestra cabeza tenemos esa idea. En el caso en el que el gato negro nos observe fijamente quiere decir que continuamente nos estamos cuestionando a nosotros mismos. Dudamos de nuestras capacidades, conocimientos o intuiciones.
Gato sumiso
El mensaje que nos envía esta experiencia onírica es el de la necesidad que tenemos de ser conscientes de nuestras emociones. Poco a poco vamos haciendo las paces con los problemas personales que tenemos. Cuando notamos repulsión hacia el gato negro que se acerca significará que próximamente alguien de nuestra mayor confianza nos traicionará.
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