Conoce estas asanas para reforzar el pescuezo
Existen varias asanas para reforzar el pescuezo que aprovechan las bondades del yoga para fortalezar esta zona del cuerpo. Muchas veces, los dolores en esta parte obedecen a problemas ocasionados por mala postura, por ejemplo. Si practicas estas posiciones, de seguro verás cómo mejorará exponencialmente tu salud.
El pescuezo es una de las áreas donde más se concentra la tensión y el estrés. Por tal motivo, se intenta reducir al máximo el dolor que se acumula y que puede replicarse en otras zonas. De ahí lo trascendental de estar atento a cualquier alteración en el equilibrio natural.
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Algunos movimientos que pueden llegar a producir dolor por lo que es importante evitarlas al máximo. Se dice que es necesario escuchar al cuerpo para llegar a comprender qué es lo que realmente requiere. De hecho, si se tiene molestia al momento de aplicar estas posiciones, es mejor no realizarlas porque esta condición puede agravar más la situación.
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Cuatro asanas para reforzar el pescuezo
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Uttanasana o la postura de la pinza
Esta postura puede realizarse tanto con los pies separados como juntos.
Al inhalar, se inclina el cuerpo hacia al frente, procurando tocar el piso con las manos. Esta postura puede mantenerse tras realizar por lo menos seis respiraciones.
Posteriormente, se retorna a la postura inicial de forma lenta. Debes subir los brazos, el cuello y la cabeza.
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Matsyasana o la postura del pez
Esta asana consiste en colocarse en el piso sobre una esterilla y mantener los brazos bajo la espalda, mientras los pies apuntan hacia afuera. Cada vez que se produzca la inhalación se debe levantar el pecho mientras que la cabeza se inclina poco a poco hacia atrás. La cabeza acaba por apoyarse sobre el piso.
Una vez completadas todas las respiraciones se retorna a la posición inicial deslizando la cabeza poco a poco.
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Ardha Matsyendrasana o la postura de la media torsión
La rodilla derecha debe permanecer sobre la esterilla mientras que el pie derecho se desliza hasta el glúteo izquierdo. La rodilla izquierda permanece en alto. El brazo izquierdo se dirige hacia atrás hasta ubicarse en el medio de la espalda. Este brazo permitirá crear el punto de equilibrio necesario. La inhalación permitirá que la espalda se estire lo suficiente. Al exhalar, el cuerpo debe girar de forma tenue hacia el lado izquierdo.
Este asana puede mantenerse por lo menos durante seis respiraciones. Para retornar a la posición original tan solo se debe cambiar las piernas y los brazos de posición, así como girando de manera progresiva el cuello y la columna.
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Gomukhasana o la postura de la cara de vaca
Las piernas deben permanecer dobladas y los tobillos deben estar hacia la cadera del lado contrario. La pierna derecha se coloca doblada sobre la izquierda. El brazo derecho se eleva y se coloca sobre la espalda. El brazo izquierdo se coloca hacia atrás desde la cintura. Esta posición debe mantenerse durante seis respiraciones. Para ayudar a realizar esta asana se puede emplear una correa.
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