El hogar es nuestro nido de amor, allí están nuestros seres queridos y el reflejo de nuestro trabajo, pero ¿qué haces para atraer buena suerte a tu casa? Aquí te dejamos un ritual de buena suerte para al hogar muy efectivo.
Es necesario tener un espacio cargado de paz y prosperidad para avanzar en nuestra vida. Si sientes que tu hogar no está en armonía, no esperes más y atrae la buena suerte sin acudir la magia negra.
Ritual de buena suerte para al hogar
A lo largo de la historia, el siete es el número en el que se ha depositado más simbolismo cultural, místico y religioso. Los judíos declararon que a Dios le tomó siete días hacer el mundo, de allí la importancia de cumplir este ritual en una semana.
Solo debes tener a mano:
- 7 recipientes pequeños de vidrio,
- 7 cucharadas de miel de abeja y
- 7 hojas de menta.
Coloque una cucharada de miel en cada uno de los recipientes y coloca encima una hoja de menta.
Mientras lo hace, diga la siguiente oración:
Todopoderoso, te pido que así como yo (Nombre y apellido) coloco esta miel en este recipiente, tú endulces mi vida y la de todos los seres que amo.
Aleja toda negatividad, envidias, malas intenciones y trabajos del mal de esta casa.
Te pido que esta miel y está menta atraigan la buena suerte a este hogar y a todos los que en él habitan en paz.
Gracias, porque sé que me has escuchado.
Al finalizar esta oración, que debes hacerla visualizando el bien de tu familia, distribuye los recipientes por toda tu casa, los dejas por 7 días y luego recoges.
Después de cumplir este ritual de buena suerte para al hogar verás cómo todo comienza a cambiar en tu hogar. Se abren las puertas de la buena suerte.
Lograrás conseguir el trabajo indicado, a tus hijos les irá bien en el colegio, tendrás abundancia y prosperidad.
La armonía familiar, la buena salud y el amor, dependen de las energías que fluyan en tu vivienda. Haz de tu casa un templo sagrado. No esperes que la negatividad se apodere de todos los espacios.
Es mejor confiar en lo que dicen las culturas milenarias y atraer armonía con pequeños rituales. Por alguna razón estas creencias se han mantenido a lo largo de los siglos. Seas supersticioso o no, a nadie le cae mal la buena suerte.
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