Turismo religioso: cuando los viajes son impulsados por la fe

Viajar es abrir la mente a nuevas experiencias. Conocer lugares y gentes diferentes permite ampliar la perspectiva que tenemos del mundo y comprender que la realidad puede contemplarse siempre desde diversos ángulos. Cuando la idea es desplazarse a lugares fundamentales para la fe que se profesa estamos ante un moderno peregrinaje denominado turismo religioso.

Aunque ambos están motivados por la fe, el peregrinaje se basa más en un largo camino exterior y de búsqueda interior hasta llegar al lugar de devoción. Un claro ejemplo lo tenemos en el Camino de Santiago. En él se recorre un camino que lleva hasta Santiago de Compostela. Durante dicho camino el peregrino sufrirá, reirá, llorará, estará a punto de rendirse muchas veces… Pero al final llega a su destino convertido en una persona nueva, con el espíritu saneado para confirmar su fe.

En el turismo religioso, el concepto es el mismo pero los medios para llegar son mucho más rápidos. Ya sea en avión, tren, coche o autobús, los fieles dedican tan sólo unos días de su apretada agenda para llegar al lugar de culto. Roma, Jerusalén, Santiago de Compostela o La Meca son los principales lugares de turismo religioso cristiano e islámico.

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Origen del turismo religioso

En la época de la Grecia clásica disfrutar del tiempo libre resultaba primordial. Olimpia era el destino de miles de ciudadanos cuando se celebraban los Juegos Olímpicos Antiguos. Allí se mezclaba tanto la devoción por el deporte como por la religión. El oráculo de Delfos y de Dódona eran lugares donde se peregrinaba también por motivos religiosos.

Durante la Edad Media, tanto el cristianismo como el islamismo potenciarían el turismo religioso. Junto al ejemplo ya comentado del Camino de Santiago, también son famosas las peregrinaciones desde Venecia a Tierra Santa. Gracias a estos viajes masivos tuvo que crearse una red de albergues, hospederías, hospitales e iglesias para facilitar el trayecto a los peregrinos además de potenciar la economía de las zonas que atravesaban. Por su parte, el viaje a La Meca es otro de los pilares básicos del islam, ya que todo fiel debe peregrinar a ella por lo menos una vez en su vida.

Con el paso de los siglos y las mejoras tecnológicas de los transportes, las largas peregrinaciones terminaron convirtiéndose, en la mayoría de los casos, en breves estancias de tres o cuatro días en las ciudades santas. Sin embargo, peregrinaciones como el Camino de Santiago, aún siguen manteniendo su fama e importancia. Cada año son miles los peregrinos que atraviesan España para llegar a Santiago de Compostela.

Principales destinos católicos del turismo religioso

Roma

Tanto el Vaticano como la Basílica de San Pedro son de obligada visita cuando un católico va a Roma. Bajo la Basílica está enterrado San Pedro, uno de los discípulos de Jesús y primer pontífice de la Iglesia.

Jerusalén

Situada en Israel, es una ciudad santa para las tres principales religiones: cristiana, judía e islámica. En el barrio cristiano está la Iglesia del Santo Sepulcro; en el judío se encuentra el Muro de las Lamentaciones y el barrio musulmán contiene la Cúpula de la Roca y la Mezquita de Al Aqsa.

Santiago de Compostela

Su magnífica catedral dedicada al Apóstol Santiago constituye un espectacular destino final para el último de los más largos e intensos peregrinajes cristianos aún en vigor.

Santuario de Nuestra Señora de Lourdes

Este santuario situado en Francia ha sido testigo de curaciones milagrosas comprobadas científicamente y de numerosas conversiones. Cada año llegan miles de peregrinos procedentes de todos los países del mundo.

Santuario de Nuestra Señora de Fátima

Se encuentra en Portugal, en la Cova da Iria. Sin duda es uno de los principales santuarios marianos que hay en el mundo. Tanta es su afluencia que se han marcado los caminos para facilitar la llegada a él, (Camino do Tejo y Camino do Norte) como ocurre con el Camino de Santiago.

Basílica de la Virgen de Guadalupe

Está ubicado en la ciudad de México, al pie del Cerro del Tepeyac. Es el principal templo católico de América y uno de los más frecuentados del mundo, con unos veinte millones de visitantes cada año.

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